SANTIAGO.- Los 13 haitianos que se ahogaron el pasado 6 de agosto al caer en un canal de riego en el municipio de Esperanza, Valverde, el vehículo en que se transportaban, eran miembros de una misma familia del vecino país.
Así lo reveló el arzobispo metropolitano de esta ciudad, monseñor Freddy de Jesús Bretón Martínez durante su comparecencia en el programa “Comunicación y Vida”, de la Iglesia Católica y que conduce el periodista Virgilio Apolinar Ramos.
“Lamentamos mucho esa tragedia y desde aquí nuestras más sentidas condolencias a sus familiares, donde incluso había dos niños, uno recién nacido”, comentó monseñor Bretón Martínez.
Indicó que es muy triste recibir esa noticia, donde 13 miembros de una misma familia fallecen y en esas circunstancias, ahogados.
El arzobispo santiagués expresó su confianza de que episodios como lo del pasado domingo 6 de agosto no vuelvan a ocurrir, con ciudadanos que salen huyendo de Haití por las precarias condiciones de vida que hay allí.
Mientras tanto, 23 días después de esa tragedia, las autoridades policiales ni del Ministerio Público han informado si localizaron o no al chofer del vehículo, quien salió ileso y huyó.
Indica Narciso Pérez que en el lugar del accidente, las autoridades policiales recabaron una cédula que estaba a nombre de Elmer Eleazar Durán, residente en Dajabón y se creía que éste pudiera haber sido el conductor de la jeepeta placa G-237587, donde viajaban los fallecidos.
Sobre los cadáveres, solo tres de los cuatro que identificaron fueron reclamados por sus parientes, los demás quedaron sin identificar y se informó que serían sepultados en una fosa común.
La finalidad de esa viaje era depositar a los ciudadanos haitianos ilegales en Santiago, localidades del Cibao Central e incluso Santo Domingo.
Son frecuentes los accidentes de vehículos transportando a ciudadanos de manera irregular procedentes del vecino país de Haití hacia la República Dominicana.
