Elon Musk no pudo evitarlo. A pesar de que aseguró que el “piloto automático” del Tesla accidentado por el cual murieron dos personas en Houston no estaba activado, las acciones de su compañía estrella se precipitaron. “Los registros de datos recuperados hasta ahora muestran que el piloto automático no estaba habilitado”, señaló el CEO de la empresa en un mensaje por Twitter respondiendo una nota del diario The Wall Street Journal.
Herman dijo que el posteo de Musk el lunes por la tarde en el que decía que los registros de datos recuperados por la compañía hasta el momento descartaban el uso de la función “piloto automático”, era la primera comunicación que las autoridades habían oído de la compañía. “Si está tuiteando eso, si ya ha sacado los datos, no nos lo ha dicho”, dijo Herman a Reuters. “Esperaremos con impaciencia esos datos”.
Pero mientras esto ocurría, las acciones de Tesla y la fortuna personal de Musk se derrumbaban. El valor de los títulos de la corporación cayeron un 3.8% a las 3:45 p.m. EST del lunes, recortando 5.6 mil millones de dólares de la fortuna de Musk. Ahora tiene un valor de 174,1 mil millones de dólares, según Forbes.